Poco después de publicar
su último disco, Beyoncé comentó que se quiso asegurar Pretty Hurts nada más escucharla. Desconocíamos, eso sí, ante quién tenía que blindar el tema. Ahora,
su compositora, Sia, ha revelado que primero envió la canción a Katy Perry y a
Rihanna.
Sia le mandó un email a
Katy con Pretty Hurts, pero ella nunca llegó a verlo. También se la dio al
management de Rihanna, quien retuvo la canción durante ocho meses. Sin embargo,
no pagaron los derechos y la perdieron, así que finalmente fue a
parar a manos de Beyoncé, quien se hizo con ella.
Cuando Katy se enteró de
la noticia, le escribió un mensaje a Sia en el que le decía: “Estoy ‘bastante dolida’
[juego de palabras con el título del tema en el original inglés ‘pretty hurt’] porque nunca me enviaste
esta canción”. Pero le gustó la versión final y le comentó después: “Tenía
que ser para Beyoncé, por supuesto”.
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