Muse se la juega con The 2nd
Law. El grupo se adentra en la electrónica, lo que puede disgustar a los fans
de sus primeros discos. Una muestra de ello es el revuelo que se montó en torno
al primer tráiler que lanzaron del álbum, aquel en el que incorporaban elementos
dubstep. Al margen de mantener su esencia o no, en The 2nd Law experimentan con
diferentes sonidos y mezclan todo tipo de influencias para ofrecer un trabajo notable.
Una poderosa guitarra da inicio
a Supremacy y al disco. En cuanto empieza a cantar Matt Bellamy, la canción se
convierte en una especie de número de algún musical (denso y rock, eso sí). De
este modo indican que no han perdido ese punto dramático y grandilocuente, como
demostraron en la canción de los Juegos Olímpicos de 2012, Survival, que contiene
toda la épica que requería la ocasión: coros operísticos, muchas guitarras y la
voz de Matt llevada al límite. En la funk Panic Station, adoptan ese mismo tono, motivo por el que se convierte en candidata a single.
Pero en The 2nd Law también hay
espacio para canciones más relajadas. Animals tiene una guitarra folk y una
melodía que hipnotizan hasta que al final llega el caos de unos disturbios. No
resulta tan interesante la aburrida y excesivamente larga Explorers, una nana
fruto de la reciente paternidad de Matt, que además va seguida de la saltable
Big Freeze, el momento U2 de Muse. La sorpresa viene con la envolvente balada
Save Me, cantada por el bajista Chris Wolstenholme. Suena mejor que el otro
tema que se reserva para sí mismo, la oscura Liquid State, que podría haberse
quedado como una cara B.
Con Madness, dieron a conocer
el nuevo rumbo que habían tomado. A pesar de las obvias influencias de Queen y
George Michael, le dan personalidad a esta sensual canción con una magnífica y
tensa base electrónica que estalla en un gran clímax final. Más lejos llegan en
Follow Me, que Matt dedica a su hijo (incorpora los latidos de su
corazón antes de nacer). En ella fusionan el rock con el dubstep contando con
la ayuda de Nero, una banda conocedora del género.
Muse se guarda para el final la
explicación sobre la “segunda ley” que da título al álbum. Lo hacen a través de
una canción con el mismo nombre dividida en dos partes. En Unsustainable dan su
visión del dubstep (y realmente no les ha salido mal), mientras que en Isolated System dejan que
un magnífico piano sea el hilo conductor. Todo ello mientras se escuchan varias
voces que vienen a decir que un sistema como el nuestro basado en el
crecimiento constante y en recursos escasos es insostenible.
Puede que The 2nd Law no guste
a parte de los fans de Muse. Sin embargo, han probado cosas nuevas y han
obtenido un resultado cuanto menos entretenido. Es cierto que al conjunto le
falta cohesión, pero no parece que el grupo la buscara. Al fin y al cabo,
querían divertirse y, por encima de todo, renovar su sonido y sorprender.
Nota: 8
Destacamos: Supremacy, Madness, Panic Station, Animals
Simple pero concisa. Un viaje mas ulterior habria dado mas pistas.. Bien
ResponderEliminarDisco del cual se tiene que tomar como un paso hacia una nueva carrera.