
La artista ha dejado claro que Dr. Luke no abusó sexualmente de ella ni nada por el estilo, pero sí ha comentado que tuvo una mala experiencia en el estudio de grabación con él. “La última vez que trabajé con él fue solo porque, literalmente, la discográfica me chantajeó. Me dijeron: ‘No lanzaremos tu disco si no haces esto’. Fue una época difícil para mí”, ha explicado cuando le han preguntado sobre Luke. “Para mí, no es buena persona. Chocamos, pero no puedo decir nada más que eso. Puedo hablar de su carácter y, desafortunadamente, cuando tienes ese carácter, no le gustas a muchos artistas y no quieren trabajar contigo. Eso no es normal”.
“Es un tío con talento, pero ha mentido mucho. He tenido un par de experiencias realmente malas”, ha contado. “Musicalmente, fue duro para mí porque él miente a la gente. Es como ‘¿Qué?’. Deja mal al artista. Es difícil trabajar con él, es humillante y desdichado. La gente me dice que he trabajado con Max Martin y Dr. Luke, pero yo digo que son muy diferentes. Obviamente [Dr. Luke] tiene talento, pero no un buen carácter”.
Kelly se ha referido también específicamente al caso de Kesha. Ha dicho que hay quien le pide que la defienda más, pero ella afirma que no conoce la situación y que lo único que puede hacer en este caso es ser “realmente honesta sobre Dr. Luke”.
El productor, por su parte, se ha defendido de estos ataques recuperando un fragmento de las memorias de Clive Davis de 2013, The Soundtrack Of My Life. En ellas, el ejecutivo, que jugó un papel importante en la carrera de Kelly, contaba que Max Martin y Dr. Luke son duros en el estudio porque quieren sacar lo mejor del artista, lo que según él hizo que Kelly tuviera una experiencia horrible, y explicaba cómo los dos productores y la intérprete llegaron a trabajar juntos en Breakaway. La cantante, en su día, dio su versión sobre los hechos que narraba Clive.
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