Recientemente han hablado Kesha y Dr. Luke sobre su batalla legal, pero faltaba por pronunciarse la tercera parte implicada: Sony. Kemosabe Records, el sello de Luke en el que trabajaba Kesha, es una subsidiaria de Sony, lo que ha hecho que la discográfica se vea involucrada en el caso. El abogado de la compañía, Scott Edelman, ha explicado la posición de Sony en el asunto. “Sony ha hecho posible que Kesha pueda grabar sin ninguna conexión o interacción con Luke, sea del tipo que sea, pero Sony no está en posición de terminar la relación contractual entre Luke y Kesha”, ha afirmado en el New York Times. “Sony está haciendo todo lo posible por apoyar a la artista en estas circunstancias, pero es legalmente incapaz de anular un contrato del no que es parte”.
El problema se debe a que Kesha firmó un contrato con Kemosabe Records y Kasz Money de Dr. Luke. Aunque estas trabajan con Sony, dicho contrato no supone un acuerdo directo con la discográfica.
Sony responde así a las críticas que ha recibido en los últimos días por no dar por finalizado el contrato entre Kesha y Dr. Luke. De hecho, incluso un grupo de fans de la cantante protestó ante la sede de la compañía pidiendo la libertad de la artista.
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