Cinco años han pasado
desde que Lily Allen publicó It’s Not Me, It’s You. Durante este tiempo, se ha
mantenido alejada de la música para formar una familia, aunque finalmente ha
encontrado la inspiración para escribir nuevas canciones. Como ya hiciera con
su segundo álbum, se ha reunido con Greg Kurstin para dar forma a Sheezus, un
disco en el que nos cuenta qué ha sido de su vida y da su opinión sobre la
situación actual de la música y la cultura pop en general.
Hard Out Here, como
primer single, es una declaración de intenciones. Este himno feminista con bien
de autotune y una letra en la que no hay lugar para la sutilidad resulta
divertido a la vez que hace reflexionar sobre el machismo de la industria
musical. No es la única vez que Lily aborda el tema. En Sheezus, con menciones
a Katy Perry y Rihanna entre otras, habla sobre la competición en la que se ha
convertido el pop femenino. La producción, con toques hip hop, es curiosa, pero
se hace plana y aburrida. Y en Insincerely Yours critica
el famoseo, algo de lo que admite ser parte, sobre una base de inspiración
funky que funciona bastante bien.
Lily también tiene la respuesta
preparada para aquellos que la critican y la criticarán.
Obviamente viene en forma de canción. O canciones. Silver Spoon, con una base
hip hop que parece una parodia del género, lidia con los reproches que le han
hecho por proceder de una familia acomodada. Y URL Badman se convierte en una
de las mejores respuestas a los trolls de internet.
La artista nos dejó claro lo
feliz que era con su vida en pareja cuando quiso usar su nombre de casada, Lily
Rose Cooper, como nombre artístico. Por eso, no sorprende que aquí cante sobre su
matrimonio. L8 CMMR, dedicada a su marido, juega con unos divertidos arreglos
electrónicos. Una pena que cuando intenta recuperarlos en Air Balloon falle y
pase a ser una copia de la M.I.A. más blandita.
La cantante nunca ha ocultado
que le gusta mucho la fiesta. Y aunque lo celebra en Our Time, no puede evitar
darle un halo de nostalgia. Porque, como cuenta en la más que resultona Life
For Me, ahora ha decidido pasar más tiempo en casa cuidando de sus hijas,
aunque a veces eso le genere sentimientos encontrados. A pesar de haber perdido a un hijo
antes de nacer, tema sobre el que se sincera en la vulnerable Take My Place,
Lily tiene una vida tranquila como esposa y madre, un papel en el que está muy
cómoda, tal y como confiesa en As Long As I Got You, con unos irresistibles
aires country.
Sheezus no es el mejor
disco de Lily Allen, algo que ella misma ha admitido. Sigue siendo una letrista
interesante gracias a que mantiene, salvo alguna excepción, la espontaneidad y
el toque costumbrista que siempre la han caracterizado. Pero las melodías no
acompañan del todo y carecen del gancho de sus anteriores trabajos, lo que ha
restado encanto al conjunto. Aun así, es un placer tener a Lily de vuelta en el
pop.
Nota: 6,5
Destacamos: L8 CMMR, Our Time, As Long As I Got You, Insincerely Yours
Me ha gustado pero como decís no es su mejor disco.
ResponderEliminarSe queda por debajo del nivel de los dos anteriores.
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