El segundo single de Kiss Me Once debería
renovar el interés por el disco, pero Kylie Minogue ha perdido una oportunidad
con el vídeo. La cantante ha cogido un set de rodaje y a mucha gente y se ha
situado en medio de todos mientras pasean. Muchos movimientos de mano por su parte
y un poco de baile conjunto, pero poco más pasa en los casi cuatro minutos de
clip.
Aun así, todo tiene una explicación. “Este
vídeo es una mirada abstracta en la vida de los peatones y cómo todos intentamos
sobreponernos a los desafíos cotidianos”, cuenta Kylie. “Aunque la canción
habla sobre un suceso real que me pasó el día que grabé con Pharrell, el vídeo
tiene un enfoque más conceptual y me encanta lo surrealista que ha quedado. Me vi
casi dirigiendo el tráfico y me hizo pensar en cómo todos intentamos tratar con
nuestro camino en el día a día”.
Kylie va a necesitar que este tema
producido por Pharrell llame la atención del público, ya que Kiss Me Once ha
tenido una acogida más bien fría. En Reino Unido debutó en el segundo puesto y,
ocho semanas después, se encuentra fuera del top 75.
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