Los chicos del
instituto Barrington de Chicago estaban muy emocionados por conocer a Rihanna,
que iba a visitarlos por ser los ganadores de un concurso promovido por ella misma.
Sin embargo, la alegría de los 2.500 estudiantes se fue apagando. La artista
debía estar allí a la 1 de la tarde, pero no llegó hasta las 5. Es decir, los
tuvo cuatro horas esperando en el gimnasio, lo que causó la indignación de los
profesores.
Cuando por fin se presentó, su visita apenas duró 15 minutos. Se hizo unas cuantas fotos, dio un
pequeño discurso y se marchó. Pero a los chicos les pareció suficiente, ya que
la despidieron con gritos y aplausos.
No parece que el
evento le interesara mucho, a pesar de que comentara en Twitter que no podía
esperar para verlos. Respecto al retraso, culpó al tráfico, aunque no cuela.
Cuatro horas es demasiado tiempo. Eso sí, como compensación les regaló entradas
para el concierto que daría en la ciudad.
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