‘Some Nights’, una buena forma de conocer a fun.

Fun. no son unos recién llegados. En 2009 publicaron su debut como grupo, Aim And Ignite, y su cantante, Nate Ruess, era miembro de la banda The Format, que empezó a tocar en 2001. Sin embargo, fun. eran unos desconocidos hasta que dieron el pelotazo con el single We Are Young, que ha llegado al número 1 en Estados Unidos (su interpretación en Glee probablemente tenga mucho que ver en ello). Ante esto, su nuevo disco, Some Nights, ha despertado interés entre el gran público. Por suerte, fun. no presenta un álbum cuyo peso recae solo en un magnífico single, sino que resulta ser una interesante propuesta. Las influencias de Queen en este grupo son más que evidentes, sobre todo por la forma tan teatral de cantar de Nate Ruess. Pero hay otro nombre que está presente a lo largo del disco: Kanye West. La banda estaba tan fascinada con las melodías del rapero que insistió a Jeff Bhasker (productor de My Beautiful Dark Twisted Fantasy) para que les produjera el álbum.
Some Nights se abre con una Intro que refleja el carácter melodramático de la banda. Una orquesta, una melodía propia de la ópera y la voz de Ruess subiendo y bajando son una buena forma de adentrarse en el disco. A continuación, se escucha a un coro cantando a capela. Es el principio de Some Nights, una canción épica que crece sin parar. Una vez se le añade la percusión, no hay vuelta atrás: atrapa. En su contra puede jugar cierto momento en el que el uso de autotune resulta ridículo, pero afortunadamente dura poco. En la misma línea épica está el himno We Are Young, con un estribillo cautivador. La canción funciona sola, pero añadirle a Janelle Monáe le suma aún más puntos. Además, aparece justo cuando el tema explota con los “Na na”. Las reminiscencias de Queen, presentes en Some Nights y la Intro, vuelven a repetirse en Carry On, que empieza como una insulsa balada y se pone más interesante conforme avanza, y en Why Am I The One, cuyo gran final no salva el resto de la canción. En It Gets Better, en cambio, optan por una pegadiza melodía pop-punk en la línea de Green Day.
En la segunda mitad de Some Nights puede apreciarse la influencia hip hop de Jeff Bhasker. All Alone supone la primera aproximación. El piano barroco que da inicio a la composición engancha de inmediato. Sin duda, es una de las canciones más divertidas del álbum. También están All Right, con una base típica y un confuso coro de niños, y One Foot, ideal para animar un desfile gracias a sus platillos, trompetas y demás instrumentos. El álbum se cierra con Stars, tan ambiciosa y grandilocuente que no cumple. Lo que antes había funcionado, aquí falla. El autotune es exagerado y molesto. Además, se produce un cambio de melodía que arruina lo que se había escuchado hasta el momento.
En conjunto, Some Nights es un disco que se disfruta con facilidad a pesar de que en algunos momentos se vuelve histriónico y recargado. Pero fun. han trabajado en serio para presentar una propuesta estimulante en la que los aciertos superan los fallos. Por suerte, We Are Young ha hecho que bastante gente los descubra y reconozca su trabajo. Habría sido una pena que Some Nights hubiera caído en el olvido.

Nota: 7,2
Destacamos: Some Nights, We Are Young (feat. Janelle Monáe), All Alone, One Foot
COMPARTIR
    Comentarios de Blogger
    Comentarios de Facebook

1 comentarios:

  1. pues perdon, pero es tan bueno el alerne de estilo enre las distintas canciones como entre carry on y we are young como entre esas y stars, todas son de estilos bastante mezclados, algo que hace que sean tan agradables, sin ser repetitivos. pero por el resto me encanta el comentario del grupo!

    ResponderEliminar