La crítica se ceba con George Michael

Durante años ha sido criticado por protagonizar escándalos sexuales o relacionados con las drogas y el alcohol. Ahora que es noticia por su regreso a los escenarios, vuelve a ser criticado, seguramente, por aquellos quienes un día le veneraron y que ahora le miran como a un juguete roto. ¿El motivo? George Michael ha regresado a la palestra con una nueva
gira, Symphonica: the Orquestral Tour. Un proyecto más serio y maduro en comparación con el espectáculo al que nos tenía acostumbrados. Ataviado con traje de raso y acompañado de 40 músicos de orquesta, George Michael ofrece un show sinfónico con éxitos propios y versiones de temas de otros artistas, desde The Police hasta Rufus Wainwright pasando por Amy Winehouse. En Symphonica: The Orquestral Tour descubrimos a un George Michael más elegante y nos damos cuenta de que es capaz de interpretar piezas de jazz y soul con un magnífico resultado.
No obstante, la mayoría de críticas expedidas sobre la gira se construyen alrededor de alguna de las siguientes premisas:
1)  Que George Michael ha hecho bien en vestir su música de esmoquin porque ya está muy mayor para seguir siendo un icono del pop. Por ello es conveniente que adapte su música a su madurez física.
2)  Que George Michael es un cantante venido a menos, patético, y hace el más absoluto de los ridículos intentando recuperar la fama que un día obtuvo.
Aquellos quienes quieren dar por finiquitada la carrera de George Michael parecen no darse cuenta de que hablan, irrespetuosamente, de uno de los más grandes iconos del pop. Un artista, más allá de los infortunios de su vida personal. Aretha Frankilin y Elton John no cantan con cualquiera. Con él sí. Por algo será. George Michael nos ha dejado un legado musical que, pese a componerse de éxitos de listas de top ten, traspasa generaciones. Su figura es ya una leyenda y su producción musical, parte de la banda sonora de la vida de millones de personas.  
En su momento fue el sexsymbol de adolescentes de medio mundo. Su fama parecía perecedera, pero no lo fue. Hoy sigue siendo un ídolo de masas, un referente del pop.  Más allá de una estética llamativa, George Michael es un cantante de voz prodigiosa. Por ello, su talento no debe ser ninguneado soterrándolo bajo el estiércol que producen los medios sensacionalistas sobre su vida.  A día de hoy hay periodistas a quienes les encanta vaticinar la muerte musical de los artistas y condenarlos al fracaso. Pero, como ha hecho siempre, George Michael acaba sobreponiéndose a sus flaquezas y a los ataques externos. Sus fans le conocen y, por ello, siguen admirándolo como el primer día. Mal que le pese a sus detractores.
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1 comentarios:

  1. Estoy totalmente de acuerdo. Además, George Michael ha sido siempre un artista (cantante y compositor) que ha ido evolucionando, reinventándose y superándose a sí mismo. Ya quisieran muchos contar con su reputación y la cantidad de fans que tiene alrededor del mundo.

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