Taylor Swift quiso subir
al escenario a dos conocidas cantantes en sus últimos conciertos en Los
Ángeles. Un día contó con Ellie Goulding para interpretar Anything Could Happen.
Tras presentarla como una amiga y una de sus artistas favoritas, cantaron
juntas el primer single de Halcyon.
Y, al día siguiente,
Taylor invitó a Jennifer Lopez, con quien quizá tiene poco que ver, pero sobre
la que dijo que le gustaba cantar Jenny From The Block en su casa cuando era
pequeña. Esta vez lo hizo a dúo con la intérprete original, que además se marcó
unos pasos de baile.
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