Katy Perry nos sigue recordando que el
próximo 12 de agosto podremos escuchar su nuevo single, Roar. Y lo hace, una
vez más, adoptando un tono oscuro y dando por muerta, en el sentido literal, la
era Teenage Dream.
En el primer teaser, quemó una de las pelucas que usó durante la promoción del anterior disco. Ahora, Katy asiste al
funeral de Teenage Dream. Frente a un colorido ataúd lleno de caramelos y
rosas, hay una multitud llorando su pérdida, entre ellos un par de niñas desoladas
con pelucas lilas. Por su parte, la cantante no lamenta el entierro. Mira por
encima de sus gafas de sol y sonríe.
Veremos si realmente todo esto va
acompañado de un cambio de sonido. Adopte o no un nuevo estilo, lo que no ha
cambiado ha sido el sentido del humor de Katy.
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